RESEÑA: TOM STRONG
TOM STRONG
EDICIÓN ORIGINAL: Tom Strong Book 1 USA y Tom Strong Book 2 USA (Tom Strong núms. 1 a 14 USA)
GUIÓN: Alan Moore
DIBUJO: Alan Weiss, Art Adams, Cam Smith, Chris Sprouse, Dave Gibbons, Gary Frank, Gary Gianni, Hillary Barta, Jerry Ordway, Kyle Baker, Paul Chadwick, Pete Poplaski, Russ Heath
FORMATO: Cartoné, 384 págs. A color.
ECC EDICIONES
PvP: 34,50 €
Quizás la de Tom Strong fuera la serie de las creadas por el barbudo de Northampton dentro de su sello semiindependiente ABC (American Best comics) que menos llamó la atención de crítica y público.
Tom Strong no es un tebeo de Psicomagia mezcla de supehéroes que fue Promethea, o la fantasía metapoliciaca llena de referencias pop que era TopTen.
Tom Strong es la carta de amor que escribe Moore hacia una época, donde la literatura popular y el comic para todos los públicos era lo que se imponía, o como se le suele llamar, la época Pulp
A través de historias superficialmente banales, donde la imaginación, y a veces una inocencia poco escondida crea Aztecas de otra dimensión que adoran a una deidad digital, o un grupo de féminas nazis que conservan aún sus valores en pleno siglo de los Ciencihéroes, se esconde un profundo respeto hacia la literatura Pulp, llamada así por la calidad de sus encuadernaciones, hechas de papel de pulpa, lo mas barato para imprimir en los años 20 y 30.
Doc Savage, La Sombra, o el mismísimo Tarzán son representantes de esa era, pero como Moore es un trilero de los buenos, nada es al azar, e historias llenas de aparentemente buenos muy buenos, y malos muy malos, tienen detrás un entramado de personajes fantásticos de vistosos nombres, que, como es habitual en Moore, se nombran pero casi nunca se ven, haciendo trabajar la imaginación del lector, que es lo que al final se propone el guionista.
En el aspecto gráfico, Chris Sprouse funciona a la perfección, con un estilo clásico y de líneas claras, ideal para ilustrar a un protagonista y su disfuncional familia rodeados de hiperplatillos, teleféricos urbanos y mochilas voladoras.
Pero lo curioso lo encontramos es en las ayudas que tiene el dibujante, o más bien colaboraciones buscadas, en las historias de Flashback, que buscan un estilo mucho mas retro, que recuerda a clásicos dibujantes de la EC como Wally Wood.
Un tebeo de los de antes, llenas de aventuras alucinantes y originales protagonistas, que no hacen más que pedir atención sobre una época mas fantástica e innovadora, donde todo estaba por escribir.
Pedro Abad
EDICIÓN ORIGINAL: Tom Strong Book 1 USA y Tom Strong Book 2 USA (Tom Strong núms. 1 a 14 USA)
GUIÓN: Alan Moore
DIBUJO: Alan Weiss, Art Adams, Cam Smith, Chris Sprouse, Dave Gibbons, Gary Frank, Gary Gianni, Hillary Barta, Jerry Ordway, Kyle Baker, Paul Chadwick, Pete Poplaski, Russ Heath
FORMATO: Cartoné, 384 págs. A color.
ECC EDICIONES
PvP: 34,50 €
Quizás la de Tom Strong fuera la serie de las creadas por el barbudo de Northampton dentro de su sello semiindependiente ABC (American Best comics) que menos llamó la atención de crítica y público.
Tom Strong no es un tebeo de Psicomagia mezcla de supehéroes que fue Promethea, o la fantasía metapoliciaca llena de referencias pop que era TopTen.
Tom Strong es la carta de amor que escribe Moore hacia una época, donde la literatura popular y el comic para todos los públicos era lo que se imponía, o como se le suele llamar, la época Pulp
A través de historias superficialmente banales, donde la imaginación, y a veces una inocencia poco escondida crea Aztecas de otra dimensión que adoran a una deidad digital, o un grupo de féminas nazis que conservan aún sus valores en pleno siglo de los Ciencihéroes, se esconde un profundo respeto hacia la literatura Pulp, llamada así por la calidad de sus encuadernaciones, hechas de papel de pulpa, lo mas barato para imprimir en los años 20 y 30.
Doc Savage, La Sombra, o el mismísimo Tarzán son representantes de esa era, pero como Moore es un trilero de los buenos, nada es al azar, e historias llenas de aparentemente buenos muy buenos, y malos muy malos, tienen detrás un entramado de personajes fantásticos de vistosos nombres, que, como es habitual en Moore, se nombran pero casi nunca se ven, haciendo trabajar la imaginación del lector, que es lo que al final se propone el guionista.
En el aspecto gráfico, Chris Sprouse funciona a la perfección, con un estilo clásico y de líneas claras, ideal para ilustrar a un protagonista y su disfuncional familia rodeados de hiperplatillos, teleféricos urbanos y mochilas voladoras.
Pero lo curioso lo encontramos es en las ayudas que tiene el dibujante, o más bien colaboraciones buscadas, en las historias de Flashback, que buscan un estilo mucho mas retro, que recuerda a clásicos dibujantes de la EC como Wally Wood.
Un tebeo de los de antes, llenas de aventuras alucinantes y originales protagonistas, que no hacen más que pedir atención sobre una época mas fantástica e innovadora, donde todo estaba por escribir.
Pedro Abad
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